¿Poca solvencia? Le vendría bien recortar gastos con un plan de ahorros para su pyme

¿Poca solvencia? Le vendría bien recortar gastos con un plan de ahorros para su pyme

La reducción de gastos es una de las actividades financieras más normales en una empresa, sobre todo, si está atravesando por un momento de poca solvencia. En este caso, es importante implementar un plan de ahorros para pymes, que le ayude a detectar gastos innecesarios.

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El manejo correcto de las finanzas de su negocio depende de la reducción de gastos. Sin embargo, la mejor manera de llevarla a cabo es elaborando un plan de ahorro para pymes, con el que podrá planear estrategias para solucionar sus problemas de solvencia.

Pensar un plan de ahorro para pymes, en todo caso, no es algo que solo se debe realizar cuando se calcula el impuesto a la renta, que incluye gastos deducibles desde la última reforma tributaria, sino que debe ser una tarea regular. Aquí le compartimos algunos consejos para hacerla lo mejor posible.

Lo inicial para establecer este plan de ahorros para pymes es detectar los gastos ocultos de su empresa. Esto no significa necesariamente reducir el personal, automatizar la línea de producción o externalizar servicio de su empresa. Lo realmente valioso de este ejercicio es analizar el verdadero costo de la producción de bienes y servicios, a través de las diferentes áreas que componen su negocio, y evaluar que gastos en este proceso resultan innecesarios.

Gastos en empleados

La revisión de los gastos de su empresa en cuanto a empleados es el primer factor para crear un plan de ahorros para pymes, sobre todo porque la incorrecta afiliación a regímenes de salud y seguridad social que puede traer sobrecostos. Si su empresa, por ejemplo, manufactura productos que requieren esfuerzo físico de la mayoría trabajadores, usted debe trazar una diferencia entre el tipo de afiliación que tienen ellos con respecto a la aseguradora de riesgos profesionales, en comparación con otros empleados que se dedican a labores más administrativas.

Otras ideas que pueden reducir los gastos desde esta área de su empresa pueden ser:

  • Aprovechar los incentivos a la contratación que promueve el Estado y que se pueden convertir en un importante ahorro.
  • Implementar un sistema de prevención de riesgos laborales, práctica que le puede evitar grandes sobrecostos y trámites jurídicos.
  • Utilizar plataformas gratuitas para llevar la contabilidad y gestión de nóminas.


Gastos operativos

Durante la creación de su plan de ahorros para pymes también es importante preguntarse por los costos de mantenimiento y seguro de sus activos. Una investigación de los insumos que compra siempre debe tener como criterios la calidad y la duración. Muchas veces también resulta provechoso que sus proveedores hagan parte de un mercado internacional, lo que le da la oportunidad de negociar con proveedores nacionales. Otro factor clave para reducir los costos es la administración inteligente de su inventario, que debe mantenerse en un equilibrio entre no ser demasiado como para generar gastos de mantenimiento innecesarios y no ser tan escaso como para no suplir la demanda imprevista de sus clientes.

Otras ideas que pueden contribuir a las finanzas de su pyme, desde el área operativa pueden ser:

  • Realizar inversiones en innovación tecnológica nacional, práctica que no solo puede llevar a su pyme hacia una transformación industrial, sino que puede generar deducciones tributarias.
  • Invertir en iniciativas sostenibles, a través de los que se pueden conseguir certificaciones medioambientales para su pyme, y que también pueden llegar a generar deducciones tributarias.
  • Implementar una base de datos sobre un software de gestión gratuito que le ayuden a crear el plan de ahorro para pymes y generar informes internos sobre su manejo de inventario y relación con proveedores.

Gastos administrativos

Por último, la creación de un plan de ahorro para pymes también exige hacer un análisis de los gastos que surgen de procesos administrativos dentro de su pyme. Esto quiere decir que su empresa debe convertirse en un negocio energéticamente eficiente, no solo revisando el incremento o disminución en los costos de servicios como electricidad y agua, sino adaptando tecnologías como bombillas ahorradoras de luz y sistemas de ventilación que no trabajen con luz.

Otras prácticas que contribuyen a este aspecto son: el archivo y publicación de información interna a través de medios digitales, con el fin de ahorrar papel, y la disminución en la compra de productos desechables de plástico.

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